La última etapa del proyecto ha sido esencial para poder oír las voces protagonistas que nos pueden hablar en primera persona del contexto colombiano.
Así ocurrió el 5 de junio, en el Salón de Grados de la Facultad de Ciencias de la Educación, donde Ofelia Castillo y Ana González, de las organizaciones Tierra Matria y Amnistía Internacional respectivamente, nos compartieron sus saberes y conocimientos sobre el conflicto colombiano y el proceso de construcción de paz que reciben miradas y atención internacional por si singularidad y relevancia en la última mitad del siglo XX y los albores del XXI.
Estas dos activistas colombianas facilitaron un espacio de reflexión y debate con la comunidad universitaria existente a cerca de la historia pero también de los retos pendientes que afronta Colombia en este nuevo ciclo político que se ha abierto y que representa esperanzas de cambio para muchas.
La situación de las mujeres como constructoras de paz desde los contextos políticos y comunitarios fue parte esencial de la estimulante conversación que mantuvimos gracias a las organizaciones implicadas con el apoyo del Plan de Apoyo a Personas Refugiadas UMA Refugia.
La segunda parte de la puesta en valor de las voces activistas colombianas tuvo lugar con el encuentro online que mantuvimos con 3 jóvenes activistas participantes de Casa Ernestina Parra, que en el municipio de Soacha facilitan acompañamiento y defensa de los derechos de las mujeres. Clemencia López Ríos, la coordinadora de dicho proyecto estuvo presente, así como Laura Marcela Sánchez Garzón, Mercy Stefanny Celis Saenz y Cindy Lorena Hernandez Criollo en representación de esa juventud activista que propone cambios significativos en la sociedad a partir de la activación como sujetos políticos, la participación comunitaria y la lucha por la igualdad de derechos de las mujeres.
El papel de la educación emancipadora como una herramienta principal para construir una cultura de paz a nivel global fue la base de la agenda común que pudimos compartir juventud malagueñas y suachuna y que nos dejó con ganas de más.